2 mayo, 2017
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UNA OLLA CARGADA DE FUTBOL POPULAR

 

*Por la asamblea poderosa del barrio San Juan Bautista, Formosa Capital.

 

 

 

Hace dos meses que desde la asamblea formoseña de La Poderosa comenzamos a transitar con firmeza los caminos del deporte popular con el objetivo de transformar la realidad de nuestros barrios. Por eso, este domingo por la tarde, con casi 60 niños y niñas realizamos un torneo de fútbol popular infantil, con una pelota embarrada, sí, pero que no se manchó ni se manchará jamás.

 

 

No buscamos ganar trofeos, nuestra meta es compartir una tarde entre vecinos, fortalecer la confianza entre grandes y chicos y hacer del fútbol popular una acción transformadora de la realidad.

 

 

Por suerte todavía quedan en las canchas algunos descarados carasucias que se salen del libreto y cometen el disparate de gambetear a todo el equipo rival, al juez, y al público de las tribunas, por el puro goce del cuerpo que se lanza a la prohibida aventura de la libertad.

 

 

Con muchas horas de dedicación y esfuerzo durante la semana, “jugar a la pelota” comienza a dar sus frutos, porque afianzamos el trabajo en equipo reciclando entre todos los materiales que utilizan los pibes en cada una de las prácticas que realizan en “La Olla”, nuestro potrero del barrio San Juan Bautista.

 

 

Los vecinos y vecinas sabemos que jugar sin hinchada es como bailar sin música, por lo que unimos nuestra garra al apoyo del Club Villa 14 y de la Biblioteca Santiago Renevot, con quienes construimos día a día las bases del espacio deportivo.

 

 

Además, para que el calor se concentre en nuestro cuerpo y las energías no se deshilachen, merendamos un rico chocolate al final de este gran evento deportivo.

 

 

Debido a la falta de recursos, cuesta sostener la apuesta colectiva, pero aun así tenemos nuevas metas: Se viene un torneo intercolegial para lo que abriremos una convocatoria a instituciones educativas de la provincia. Además, comenzamos a pensar de qué manera podemos recaudar fondos para levantar un vestuario y arreglar nuestra cancha.

 

 

Compartir una jornada es un logro y un motivo de esperanza para nuestros pibes, por lo que seguiremos apostando al deporte como resguardo de la salud.

 

 

 ¡AGUANTE EL FÚTBOL POPULAR!

 

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