
Nada que Temer
¡Se desploma la bolsa de San Pablo! Suspenden las actividades oficiales. ¡Analizan el impeachment del impechment! Y ahora allanan al Congreso, como si algo de todo eso fuera una novedad, entre la normalidad de los “exabruptos” que nos suelen vender adentro de una “desgracia”: cómo no iban a ser corruptos, ¡si asaltaron el poder y se chorearon la democracia!