21 octubre, 2016
,

“Voy a salir a defender a mi hijo, no puede ser que nos estén matando”

Justicia por Diego Jaramillo

 

El 16 de junio de 2015 Diego Jaramillo salió de la casa de su mamá, Soraya Cvitanic, diciéndole que tenía que contarle algo importante y que volvía a tomar un café con ella. Fue otro de sus hijos, Marcelo, quien llamó minutos después para contarle una noticia que nadie quisiera escuchar: “Má, Diego está muerto”. La Peugeot Partner que manejaba fue colisionada por el Jeep Compass que conducía Fernando Damián González Vera, quien no respetó dos señales de alto.

 

Al dolor de la pérdida de un hijo le siguieron la bronca y la indignación por el accionar de la Justicia: González Vera nunca estuvo detenido, tampoco le retuvieron el carné de conducir y, además, el informe de los peritos indicaba que conducía a 40 km/h, algo que refutan los hechos. Fue tal el impacto del accidente que Diego salió despedido del auto y perdió la vida al instante. “No me dejaron acercarme, nunca más lo pude ver, ni darle un beso, porque lo destruyó” recuerda Soraya. “Me mataron a mi hijo, el tipo no estuvo preso, fue al hospital y salió con un abogado. A ellos no les importó nada, no llamaron nunca para decir ‘lo siento, me equivoqué’, ¡nada! Y a su vez, la Justicia los cuida”.

 

Debido a que la causa estaba detenida y ante la desesperación, la familia de Diego realizó varias acciones: “No esperé más, lo escraché por todos lados, hasta que logré que se fueran de la ciudad. Me costó por problemas de salud, pero no me voy a quedar llorando en casa, voy a salir a defender a mi hijo, no puede ser que nos estén matando, yo tengo más hijos, un nieto, no puede ser tanta impunidad y que nadie haga nada”.

 

La jueza, Roxana Suarez, los recibió recién un año después del accidente luego de continuas actividades, marchas y un intento de tomar el juzgado por parte de sus familiares y amigos. “Cuando se cumplió un año hicimos una actividad que se llamó La Justicia está de Joda. Llevamos música adentro del juzgado, nos acompañaron artistas y llorando cantamos el himno. Mi mama decía: ‘Por mi nieto voy a morir acá hasta que nos atiendan’, nos íbamos a quedar a dormir, estábamos preparados para lo que sea. Ese fue el único día que nos recibieron”.  Esa misma semana el asesino apeló y el juicio llegó a Cámara Oral.

 

Ya pasaron más de un año y cuatro meses sin Diego, y del comienzo de la lucha de Soraya que, al contrario del deseo de algunos, cada vez exige más fuerte y entera justicia por su hijo y por todas las víctimas de accidentes viales.

 

 

 

Relacionadas

Invierno
10 junio, 2022

OLA DE FRÍO: BARRIO MADRES A LA LUCHA

#25N
25 noviembre, 2021

IMAGINARIO COLECTIVO

Incendio en Madres a la Lucha
17 septiembre, 2021

ES POR ABAJO